Alejandro Dulché, el estudiante de Arte y Diseño para Videojuegos, no inició su carrera con aplausos. Tampoco fue una persona en la que desde niño le decían que debería dedicarse a dibujar. Al contrario de otros artistas, sus dibujos no eran del agrado total de las personas. Comenta que dibujaba formas monstruosas (cráneos, cosas incendiándose, por ejemplo) y normalmente esto no se aplaude entre las personas.
Él siguió en el camino artístico no por recibir reconocimiento o aprobación de otras personas. Alejandro Dulché aún hace dibujos gracias a que desde muy pequeña edad encontró esta actividad como uno de sus pasatiempos favoritos. Es de esos que dibuja por dibujar, no más, como quien patinar por el gusto de patinar, cosa que además le beneficia para su carrera profesional.
Previamente a entrar a UNIAT el estudiaba Animación y Arte Digital en otra universidad. Su cambio surgió de la necesidad de tener materias más especializadas en animación. Su anterior escuela tenía un plan de estudios con más materias de tronco común de lo que le interesaba.
Alex agradece del cambio haber encontrado en UNIAT una mayor práctica y profundización en programas como 3ds max y Zbrush. Esto lo ha ayudado a aprender más sobre el 3D, cosa que no era su fuerte, pues prefería el 2D.
Durante su proceso como estudiante, Alejandro pasó de tener un gusto mayor por hacer videojuegos que por jugarlos. Eso no quita que ya no los juegue, pero su perspectiva profesional si cambió. Ha empezado a dedicarle mayor tiempo a hacer arte, modelar 3D, simplemente por el entretenimiento que esto le causa.
El Arte de Alejandro Dulché le apuesta a lo estilizado o fantasioso. Considera más interesante estas categorías que el realismo, por los atractivos visuales que ofrecen a las personas. Un ejemplo de esto es su trabajo. Conócelo y contáctalo en sus redes sociales:
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