Los videojuegos han sido una parte importante de mi vida desde pequeño y sé que no seré el único. Muchos de los que lean esto seguramente tendrán gratas experiencias en juegos o en espacios virtuales que les ofrezcan vivencias únicas.
En mi caso, a lo largo de los años, he explorado mundos llenos de acción, creatividad y estrategias que me han marcado de maneras únicas e inolvidables. Entre todos los juegos que he probado, hay tres que tienen un lugar especial en mi corazón y recuerdos: DOOM, Minecraft y Plantas vs. Zombies. Cada uno de ellos me ha ofrecido experiencias inolvidables, y en este texto quiero compartir el por qué los considero mis favoritos y me han fascinado.
DOOM: El Pionero de los Shooters
“Si Wolfenstein es el padre de los shooters, DOOM es el dios del género”
– Purplevenom

Cuando se habla de la historia de los videojuegos, DOOM ocupa un lugar privilegiado. Lanzado en 1993 por la empresa id Software, este juego revolucionó la industria al popularizar el género de disparos en primera persona. Aunque, por desgracia, aún no he jugado la versión original de su época, descubrí DOOM a través de sus remasterizaciones y secuelas. Para ser más precisos, he jugado DOOM 2016, y desde el primer momento me atrapó su estilo frenético y visceral.
“Los Demonios tiemblan ante su caminar y aquellos que han probado su espada le llamaron DOOM SLAYER”
– Capítulo 1, Génesis

Lo que más me gusta de DOOM es su sencillez combinada con una ejecución magistral. No hay tutorial, no hay largas explicaciones, el objetivo es claro: enfrentarte a hordas de demonios mientras exploras instalaciones futuristas llenas de pasillos laberínticos. La acción no da tregua, y cada combate te obliga a moverte constantemente, a cambiar de armas y a planear estrategias para sobrevivir.
Los sonidos, la música y el diseño visual también son elementos que me fascinan, sobre todo el METAL. La banda sonora de DOOM combina el heavy metal con ritmos electrónicos, creando una atmósfera intensa y emocionante que te impulsa a seguir adelante. Además, me encanta que el juego tenga una curva de dificultad desafiante, pero justa; lo que hace que cada victoria se sienta como un verdadero logro, y claro, los creadores se divierten con los nombres de las dificultades. No sólo eso, si el modo “Normal” ya es desafiante y divertido, qué tal un modo “Ultra-pesadilla” donde los demonios tienen mucha más vida, hacen más daño y, si mueres, no hay resurrección; la mejor elección para los verdaderos slayers.
“La historia en un videojuego es como la historia en una película porno; se espera que esté ahí, pero no es tan importante”
– John Carmack
Para mí, DOOM no solo es un juego divertido, sino también un testimonio de cómo la innovación y el mantener la esencia, puede cambiar la forma en que experimentamos los videojuegos. Siempre que quiero liberar tensión o simplemente disfrutar de una dosis pura de testosterona, DOOM es el indicado.

Minecraft

Si DOOM representa la acción y la adrenalina, Minecraft es todo lo contrario: un juego que me permite explorar mi creatividad y relajarme mientras construyo y descubro posibilidades infinitas. Este juego, desarrollado por el estudio de Mojang y lanzado oficialmente en 2011, se ha convertido en un fenómeno cultural que trasciende generaciones, y no es difícil entender por qué.

Lo que más me encanta de Minecraft es su libertad. Desde el momento en que apareces en un mundo generado aleatoriamente, tienes el control absoluto sobre lo que quieres hacer. Puedes excavar profundamente en busca de minerales preciosos, construir castillos gigantescos, explorar biomas variados o incluso enfrentarte a temibles criaturas como Creepers y Enderman´s. La falta de límites es lo que hace que cada sesión de juego sea única.
Otro aspecto que valoro de Minecraft, es su capacidad para unir a las personas. He pasado incontables horas jugando con amigos, trabajando juntos para construir bases impresionantes o sobreviviendo y aún más tiempo haciendo guerras en el servidor. La comunidad también es increíblemente creativa, y los mods, mapas personalizados y servidores han ampliado las posibilidades del juego más allá de lo que podría haber imaginado.
“¡90% libre de errores!”
– Minecraft
Quizá lo más sorprendente de Minecraft es su capacidad para enseñar. A través del juego, he aprendido conceptos básicos de programación, principios de arquitectura y hasta algo de agricultura. Claro, que en conceptos aplicados son casi inútiles, pero fue la chispa que inició mi interés por la programación. Es un juego que combina entretenimiento y educación de una manera única, y por eso, siempre tendrá un lugar especial en todo el mundo.
Plantas vs. Zombies

Por último, pero no menos importante: Plantas vs. Zombies, el primero que jugué en mi vida, y fue el inicio de todo.
Un juego de defensa de torres desarrollado por PopCap Games, ahora parte de Electronics Art Studios, y lanzado en 2009. Aunque tiene una temática más ligera y casual en comparación con DOOM y Minecraft, este juego me conquistó con su humor, su estilo visual, su mecánica adictiva y simétrica.
En Plantas vs. Zombies, tu objetivo es proteger tu casa de oleadas de zombis utilizando un jardín lleno de plantas con habilidades únicas. Lo que me encanta de este juego es su equilibrio entre estrategia y accesibilidad. Aunque las primeras etapas son relativamente fáciles, a medida que avanzas, las oleadas de zombis se vuelven más desafiantes y te obligan a planificar cuidadosamente la disposición de tus plantas. Una estrategia es necesaria si quieres sobrevivir y evitar que te coman los sesos.
Los zombis del globo sólo pueden ser derribados por el cactus, las pincho rocas son la kriptonita de los carros, los magnetos son el punto débil de los mineros; a lo que voy, es que en cada nivel puedes crear una estrategia basándose en el tipo de zombis que vendrán a la oleada .

Los diseños de los zombis y las plantas también son memorables. Desde los Peashooters hasta los Sunflowers: cada planta tiene una personalidad única, y los zombis, con sus skins y comportamientos divertidos, siempre logran ser cómicos, entretenidos y generan un desafío. Además, la música y los efectos de sonido complementan perfectamente la experiencia.
Una de las razones por las que Plantas vs. Zombies se destaca, es su capacidad para adaptarse a diferentes tipos de jugadores. Puedes disfrutarlo como un juego casual para relajarte o desafiarte a ti mismo, intentando completar todos los logros y modos extra. Incluso, después de terminar el modo historia varias veces, siempre encuentro algo nuevo que disfrutar.
DOOM, Minecraft y Plantas vs. Zombies son tres juegos muy diferentes, pero cada uno ha dejado una huella profunda en mi experiencia como jugador. DOOM me enseñó (RIP AND TEAR) la importancia de la acción y la perseverancia; Minecraft me inspiró a ser creativo y que construir mi propio imperio era posible; y Plantas vs. Zombies me recordó que la estrategia es desafiante y divertida.
Los videojuegos no sólo son una forma de entretenimiento, sino también una herramienta para aprender, explorar y conectar con los demás. Estos tres títulos me han acompañado en diferentes etapas de mi vida, y estoy seguro de que seguirán siendo parte de mis favoritos durante muchos años más. Si aún no los has probado, te invito a que lo hagas; podrías descubrir algo que también se convierta en parte de tus propios recuerdos.